CINCO COMO UN PUÑO

GRUPO GUAYAQUIL

 

Por los años 30, el movimiento cultural ecuatoriano se manifiesta con un vigor notable. Artistas y escritores realizan una obra de importancia, que busca constatar la imagen de la sociedad ecuatoriana, sobre todo en los sectores campesinos e indígenas y en el proletariado urbano. La novela y el cuento pretenden ser denuncia y documento, los narradores quieren reproducir las situaciones de miseria y degradación de ciertos sectores sociales tradicionalmente olvidados y señalar a los responsables de aquellas.

 

Por otro lado, el impacto del crecimiento del puerto de Guayaquil, un universo particular del país determinado por su pujanza comercial y su apogeo económico (época de la producción y explotación del cacao), produce que esta ciudad adquiera cierto rasgo cosmopolita que aprovecha la narrativa, que enmarcada en el realismo social, describe la situación de la gente del campo ecuatoriano.

 

En 1930, un pequeño libro publicado en Guayaquil, en la Editorial Zea-Paladines lleva el nombre de LOS QUE SE VAN, sus autores son tres jóvenes guayaquileños Enrique Gil Glibert, Joaquín Gallegos Lara y Demetrio Aguilera Malta que juntan su inventiva literaria para crear cuentos del cholo y del montubio destacando sus costumbres, pensar y actuar. Este libro será considerado como "fundacional" del relato ecuatoriano. Más tarde a ese grupo se incorporan dos destacados escritores: José de la Cuadra y Alfredo Pareja Diezcanseco (exclusivamente novelista) y de esta manera se conforma lo que se conoce con el nombre de "GRUPO GUAYAQUIL" bajo el lema, "la realidad y nada más que la realidad", a partir del cual se desarrollarán las dos décadas más fecundas del cuento ecuatoriano.

 

 

MOTIVOS DE SU UNIÓN...

 

1. Una gran amistad que los llevó a definirse de esta manera: ""Éramos cinco como un puño". Así, permanecieron mucho tiempo, hasta que a uno de ellos le llegó la muerte y a otros sus situaciones personales.
2. La bandera de protesta con la que se identificaron.
3. Literatura basada en la problemática social y sus connotaciones políticas.
4. El deseo de hacer conocer la realidad del cholo y del monyubio tan olvidada en ese entonces por las letras ecuatorianas.
5. La adaptación del lenguaje al habla popular del cholo y del montubio, así no reparan en usar palabras "buenas y malas"
6. Son temas preferidos son el ambiente rural, donde abundan escenas dramáticas y sobrecogedoras, como asesinatos atroces, violaciones, venganzas, creencias y superticiones, amores y celos enfermizos, etc.

Con la obra "Los  que se van", primero, y con el "Grupo Guayaquil", después, el relato ecuatoriano se proyecta hacia los ámbitos de la novelística iberoamericana contemporánea.